Río es una ciudad apasionante y animada con más de seis millones de habitantes. Cuando uno llega en Río, se siente inmediatamente bien. Río de Janeiro está « en » la playa y el ambiente es fantástico. Sin embargo la ciudad es muy ancha y los lugares de intereses turísticos inevitables no se sitúan siempre cercanos unos de otros. Eso significa que para un turista, no es tan fácil desplazarse en Río, al menos no tan fácil como en París, Londres o Nueva York. ¿Cuáles son las soluciones?
La marcha:
Puesto que Rio de Janeiro es ancho, no es una ciudad que debe explorarse solamente a pie. Básicamente los únicos lugares que pueden visitar paseando son las playas de Copacabana, Ipanema y Leblon. Los otros lugares de interés son demasiado distantes, inseguros o de difícil acceso (aunque tengas un plano).
El autobús:
Otra manera de decepcionarse en Río de Janeiro es utilizando el autobús. En la mayoría de las paradas de autobús, los números de los autobuses no siempre se indican, ni tampoco el itinerario. Sucede a menudo que incluso la gente local pide a los conductores qué autobús tomar (véase fotografía). ¡Además de eso, los conductores de autobús en Río se toman ligeramente por pilotos de Fórmula 1!
El metro:
Una alternativa al autobús para desplazarse en Río de Janeiro es el metro, que es seguro y limpio, pero desgraciadamente sólo tiene dos líneas que no llevan a lugares turísticos como el Pan de azúcar , el Cristo, el Jardín Botánico, el barrio bohemio Santa Teresa, la playa de Ipanema o incluso el aeropuerto o la estación de autobús principal de la ciudad.
La excursión en autobus para los turistas:
En primer lugar, en Río de Janeiro no hay paseos turísticos en autobús convertible donde se puede descender y subir cuando se quiere. Por otro lado lo que hay es un paseo que hace entrar en un autocar (a veces con capacidad para hasta cincuenta turistas) haciendo un itinerario con un horario fijo e inflexible. La crítica más frecuente sobre este tipo de servicio es que una gran parte del curso sirve para ir a buscar y a dejar gente a los hoteles, sin contar el retraso causado por algunas personas. Más asombroso es que un paseo de ocho horas puede costar 100 dólares americanos por persona, es decir, ocho horas para visitar solamente dos lugares turísticos ( la estatua del Cristo y el Pan de azúcar), así como el almuerzo entretanto.
El taxi:
Otra manera de desplazarse en Río es en taxi. A diferencia de Nueva York, en Río de Janeiro hay más taxis que clientes y aún no es la mejor manera de conocer la ciudad. Uno de los inconvenientes es que algunos conductores de taxi ( para no decir muchos) toman la carretera más larga cuando se dan cuenta que los pasajeros son extranjeros. Además, los conductores de taxis (como la mayoría de brasileños) sólo hablan portugués. Por lo tanto, la manera más cómoda y sin dificultades para visitar Río de Janeiro és contratando un guía personal con coche.
El guía personal:
La contratación de un guía turístico personal y de su coche es la manera más conveniente de visitar Río de Janeiro. Aunque sea un servicio VIP, uno no necesita ser rico para desfrutarlo. No es costoso, comparado con las excursiones en autobús. Por ejemplo, una pareja en una excursión en autobús pagará aproximadamente 142 € por una excursión de ocho horas (71 € x 2). En una excursión privada conmigo como su guía turístico, pagarán 200 € (a la exclusión del almuerzo y las entradas). [Enviame un mensaje para recibir precios atualizados]. Puesto que el precio del servicio que ofrezco está por coche y no por persona, si son más de 2 personas será una transacción mejor. En el coche hay lugar para hasta 6 personas.
¿Cuáles son las otras ventajas de contratar un guía turístico con coche?
La economia de dinero y tiempo:
El tiempo es dinero, y durante sus vacaciones en Río, es oro. Un guía turístico personal les llevará al buen lugar en el buen momento. Conducirá la excursión de una manera para evitar los embotellamientos, las filas de esperas, etc, con el fin de hacerles ganar tiempo y dinero. En resumen, su conocimiento les permitirá hacer más, en menos tiempo. Es mucho más conveniente.
La personalización y la flexibilidad:
Durante la excursión usted verá, visitará y experimentará en Río solamente lo que es importante para usted. Podrá seguir las sugerencias del guía turístico para el día o incluir lo que no está en el programa, como, por ejemplo, ida en una tienda específica, en una oficina de cambio/cajero automatico, o simplemente detenerse para una bebida o para probar un helado de frutas brasileñas. El guía se adaptará a sus deseos particulares.
El conocimiento:
Si valoriza el aprendizaje de lo que es pertinente, este paseo es para usted. Tendrá la ocasión de relacionarse con una persona local (su guía turístico) planteando cuestiones con respecto a la cultura, la economía, el sistema de educación, social y político, deporte, favelas (barrios de chabolas), los tabúes o preguntar todo lo que quiera. Es un paseo muy informativo aunque completamente diferente de algunos paseos en autocares donde algunos guías dan a los pasajeros toneladas de información inútil.
Las fotografias:
Gracias a sus bellezas naturales, Río de Janeiro es un paraíso para los profesionales o aficionados de la fotografía. El guía turístico detendrá el coche a lugares sutilmente seleccionados para que puedan fotografiar o filmar. Si durante el paseo vea a alguien o algo que quiera registrar puede siempre gritar “alto! ” y su guía apoyará precipitadamente en los frenos. ¡Gracias por abrochar su cinturón de seguridad desde el comienzo del paseo!
La seguridad:
Todas las grandes ciudades tienen sus esquinas peligrosas. Aunque Río de Janeiro sea mucho menos peligrosa que lo que a los medios de comunicación les gustá mostrar (van a observar a partir de su segundo o tercer día), el guía personal le acompañará y les aclimatará a partir de sus primeros días en Río, y le aconsejará para el resto de su estancia. Además podrá llevar con usted su cámara fotográfica, videocámara, tarjeta de crédito y dinero sabiendo que el curso tomado durante el paseo será el más seguro y siempre acompañado de una persona local.
La comodidad:
Se le buscará y dejará en el hotel sin retraso. El paseo se hará en un coche tipo minivan, espacioso, climatizado y bien mantenido. A lo largo del paseo, apreciará la música típica brasileña y podrá pre seleccionar lo que podrá comprar más tarde en una tienda de CD.
Las compras:
Con la ayuda de un guía turístico personal, tendrá la ocasión de comprar no sólo recuerdos típicos, sino también la artesanía hecha a mano y el arte en general, licores producidos en Brasil y otros productos vendidos en tiendas fuera de la ruta turística.
El almuerzo :
La gran diferencia es que se encantará de almorzar en los mismos lugares que los Brasileños, pagando el precio local en vez de almorzar en los restaurantes llenos de turistas pagando el “impuesto turista”.
¿En resumen, quien puede obtener beneficio de un guía?
Individuos solos, parejas, familias o pequeños grupos hasta 4 (+ 2 niños o 2 pequeños adultos) que prioricen:
La seguridad, la comodidad, la flexibilidad, hacer más en menos tiempo y estar con un habitante local en vez de estar en medio de los turistas.
Puesto que este servicio es cinco estrellas, va a sentirse cómodo independientemente de su edad, sexo, raza, nacionalidad, color, origen étnico, religión, orientación sexual o discapacidad física.
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